La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha anunciado que el Gobierno trabaja en un nuevo 'Plan Renove' del parque automovilístico para 2020, cuyo objetivo es sustituir la flota actual de coches diésel por coches con menos impacto medioambiental. Se trata de una medida encaminada a compensar el impacto del nuevo paquete de impuestos, entre los que destacan la subida impositiva del gasóleo hasta equipararlo con la gasolina.
Con el Movalt aún en el aire, se trazan planes para los coches de combustión
Montero indicó que el aumento del impuesto al diésel no tiene un afán recaudatorio sino de evitar consecuencias "lesivas con el medio ambiente" y con los propios ciudadanos. Por ello ha comunicado que en dos años habrá un 'Plan Renove' -aún sin nombre oficial ni dotación presupuestaria- que permita a los ciudadanos con menor renta acceder a la compra de un vehículo nuevo y menos contaminante.
En España, la edad media del parque automovilístico es de 12 años
Ante un cambio de paradigma que afectará al empleo (la principal baza que juegan los detractores), la ministra de Industria, Reyes Maroto anunció el mes pasado que el Ejecutivo presentará un plan estratégico que defienda las inversiones y el empleo en el sector automotriz.
Este plan incluirá medidas de apoyo al vehículo eléctrico, que no termina de arrancar en España. Las previsiones de la industria, desgranadas en el IV Foro Nissan sobre movilidad sostenible, esbozaban que para 2020 el 8 % del parque automovilístico español tendrá que estar formado por coches eléctricos. Y aquí la realidad: hasta julio de 2018, la cuota de mercado de estos vehículos ha sido del 1,8 %, (no obstante, un 0,3 % más que en 2017).
Recordemos que hay un presupuesto de 66,7 millones de euros aprobado pero que aún no ha sido liberado en forma de Plan Movalt y VEA Vehículos para incentivar la compra tanto de coches con motores alternativos como de infraestructura de carga. Falta un acuerdo administrativo.
Este 'Plan Renove' es algo parecido a lo que el Gobierno Alemán está poniendo en marcha, para evitar precisamente la prohibición de circulación de los vehículos diésel más antiguos. En el caso alemán, serán los fabricantes los que, de momento voluntariamente, ofrezcan o bien reparaciones de hardware o bien compensaciones para la compra de vehículos nuevos.
Fuente: Motorpasion.com // 09.10.2018