El Grupo Volkswagen orientará su negocio de posventa para adaptarlo a los inminentes desafíos de la digitalización y la movilidad eléctrica. El creciente número de coches eléctricos, cuyos costes de mantenimiento son entre un 20 y 30% inferiores a los de los vehículos convencionales, tendrá un impacto en el futuro del negocio de posventa. Sin embargo, el grupo tiene previsto incrementar significativamente las ventas y beneficios en posventa a lo largo de los próximos años. Los principales factores de este incremento serán la creciente fidelidad de los clientes impulsada por los servicios digitales y el crecimiento sostenido de la flota de vehículos.
Actualmente, 100 millones de vehículos reciben soporte de 25.000 centros de mantenimiento en todo el mundo. En 2030, habrá cerca de 150 millones de vehículos. Con ventas de 15.900 millones de euros en 2018 solo en piezas de recambio originales, el negocio de posventa supone una parte significativa de las cifras de ventas del Grupo. En comparación con 2017, las ventas crecieron cerca de un 2%. Como parte de la ofensiva de movilidad eléctrica, está previsto construir un almacén para baterías de alto voltaje en la planta de Kassel.
Christian Dahlheim, responsable de Ventas del Grupo, dijo: “El negocio de posventa ha sido una parte esencial del beneficio de Volkswagen durante muchos años. En un contexto de transformación hacia la movilidad eléctrica y la digitalización, estamos trabajando intensivamente para garantizar que siga siendo así en el futuro. Seguiremos ampliando de forma significativa esta área de negocio, que es importante tanto para nosotros como para nuestros socios”.
El objetivo del Grupo Volkswagen es tener un balance neutro de carbono en 2050. El Grupo ha lanzado la ofensiva de electrificación más ambiciosa de la industria automóvil. Hasta 2028, se lanzarán cerca de 70 modelos totalmente eléctricos, y el Grupo invertirá cerca de 30.000 millones de euros en movilidad eléctrica hasta 2023. Esto hará que la movilidad eléctrica sea accesible a amplios sectores de la población, algo que quedará reflejado en el creciente número de vehículos eléctricos a lo largo de los próximos años.
Comparados con vehículos convencionales, los vehículos eléctricos ofrecen a los clientes la ventaja de menores costes de mantenimiento y utilización. En función del uso del vehículo, la diferencia puede ser de entre un 20 y un 30% y, en el futuro, tendrá un impacto en el negocio de posventa. Con el número de vehículos eléctricos que ya están planeados -hasta 3 millones en todo el Grupo en 2025- la cuota eléctrica en el total de la flota de vehículos será de entre un 10 y un 15% en 2030. Los vehículos convencionales, con un mayor potencial de mantenimiento, seguirán representando una parte significativa de la flota de vehículos durante los años venideros.
Fuente: postventa.info // 04.09.2019